¿Cómo acompañar a los mayores a la distancia? (I)

Acompañar a las personas mayores no solo es una responsabilidad de la sociedad. Es un privilegio que nos podemos regalar y regalarles. En tiempos en que los científicos y médicos recomiendan limitar el contacto físico, igualmente podemos encontrar formas de estar con ellos. Aquí te contamos la primera parte: cómo fomentar la empatía con los mayores.

1- Buscá un adulto mayor cercano. Si no es un padre, un tío o un abuelo, puede serlo el de un amigo o un ser querido. Escribile, preguntale cómo está, averiguá qué necesita. No hay por qué cancelar una tarde para estar con ellos. Puede bastar con enviarles una foto o un mensaje. Eso vale mucho más que no tenerlos en cuenta.

2- Sé curioso y humilde. Las personas mayores han vivido mucho: aprovechá sus experiencias para aprender y conocer testimonios directos de otras épocas y mundos. "¿Te acordás cómo estaban las calles cuando Uruguay ganó en Maracaná?", "¿Qué olores había en tu juventud que ya no se encuentran?", "¿Qué fue lo primero que pensaste cuando viste llegar al hombre a la luna?". Podremos leer mil libros de historia, pero esas perspectivas viven con las personas que testificaron esos acontecimientos. Pensalo: una buena conversación puede ser como un viaje en el tiempo.

3- Explorá complicidades y fomentá hitos comunes. No hay como los abrazos con las personas que queremos. Pero si tenemos que limitar el contacto podemos buscar otras complicidades, dependiendo del grado de autonomía que la persona mayor tenga. Si ese grado es alto puede ir desde intercambiar cartas y fotos hasta compartir una serie de Netflix. Si la persona tiene mayor dependencia cognitiva quizás los intercambios no sean tan desarrollados, pero igualmente todos sentimos. Quizás es un sabor, una mirada por video o una palabra que la persona asocie al ser querido.

Debemos ser creativos y recordar que siempre sentimos y pensamos, aunque de distintas maneras, cuando el corazón late.